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Cómo se nos llegó a conocer por el nombre de testigos de Jehová

Cómo se nos llegó a conocer por el nombre de testigos de Jehová

Capítulo 11

Cómo se nos llegó a conocer por el nombre de testigos de Jehová

DURANTE las primeras décadas de su historia moderna, con frecuencia se les llamaba simplemente Estudiantes de la Biblia. Cuando otras personas preguntaban cuál era el nombre de la organización a la que pertenecían, nuestros hermanos solían contestar: “Somos cristianos”. El hermano Russell, en la revista Watch Tower, respondió así a esa pregunta: “No nos distinguimos de otros cristianos mediante algún nombre distintivo o particular. Estamos satisfechos con el nombre de cristianos, por el cual se conocía a los santos de la antigüedad” (número de septiembre de 1888).

Entonces, ¿cómo es que se nos ha llegado a conocer hoy por el nombre de testigos de Jehová?

El nombre “cristiano”

Los verdaderos seguidores de Jesucristo, tanto en el siglo primero como en la actualidad, se han referido a sí mismos y a otros compañeros de creencia con términos como “los hermanos”, “los amigos” y “la congregación de Dios”. (Hech. 11:29; 3 Juan 14; 1 Cor. 1:2.) También han llamado a Cristo “el Amo”, y a sí mismos se han llamado “esclavos de Cristo Jesús” y “esclavos de Dios”. (Col. 3:24; Fili. 1:1; 1 Ped. 2:16.) En la congregación se han empleado con frecuencia esas denominaciones, y se han comprendido fácilmente.

En el siglo primero se llamó “el Camino” al modo de vivir centrado en la fe en Jesucristo (y, por extensión, a la congregación misma). (Hech. 9:2; 19:9.) Varias traducciones de Hechos 18:25 indican que también se le llamaba “el camino de Jehová”. * Por otra parte, personas de fuera de la congregación llamaban a esta burlonamente “la secta de los nazarenos”. (Hech. 24:5.)

Para el año 44 E.C. o poco después, a los seguidores fieles de Jesucristo se les comenzó a llamar cristianos. Algunos afirman que gente que no era de la congregación les dio ese nombre en son de mofa. Sin embargo, varios lexicógrafos y comentaristas bíblicos indican que un verbo que se usó en Hechos 11:26 supone dirección o revelación divina. Debido a eso, en la Traducción del Nuevo Mundo ese pasaje dice: “Fue primero en Antioquía donde a los discípulos por providencia divina se les llamó cristianos”. (Se hallan lecturas similares en la Literal Translation of the Holy Bible [Traducción literal de la Santa Biblia] de Robert Young, edición revisada de 1898; The Simple English Bible [La Biblia en inglés sencillo] de 1981 y el New Testament [Nuevo Testamento] de Hugo McCord, de 1988.) Alrededor de 58 E.C., hasta los funcionarios romanos conocían bien el nombre “cristiano”. (Hech. 26:28.)

Mientras los apóstoles de Cristo aún vivían, el nombre “cristiano” era distintivo y específico. (1 Ped. 4:16.) Todo el que afirmaba ser cristiano, pero que por sus creencias o su conducta contradecía sus afirmaciones, era expulsado de la comunidad cristiana. No obstante, como había predicho Jesús, después de la muerte de los apóstoles Satanás sembró semilla que produjo cristianos de imitación. Estos adoradores falsos también decían que eran cristianos. (Mat. 13:24, 25, 37-39.) Cuando la cristiandad apóstata recurrió a las conversiones forzadas, algunos dijeron que eran cristianos solo para evitar que se les persiguiera. Con el tiempo, a cualquier europeo que no alegara ser judío, musulmán o ateo se le consideraba cristiano, sin importar sus creencias o su conducta.

Apodos burlones

Desde el siglo XVI en adelante, esta situación planteó un problema a los que promovían la Reforma. Puesto que el nombre “cristiano” se empleaba de manera tan indiscriminada, ¿cómo podrían distinguirse ellos mismos de otros que decían ser cristianos?

A menudo se conformaron con usar cualquier apodo burlón que les pusieron sus enemigos. Así, en Alemania los opositores teológicos de Martín Lutero fueron quienes primero aplicaron a los seguidores de este el nombre del reformador, al llamarles luteranos. En Inglaterra, a los que se asociaban con Juan Wesley se les llamó metodistas debido a lo precisos y extremadamente metódicos que eran respecto a la observancia de sus deberes religiosos. Al principio los bautistas o baptistas se opusieron al apodo de anabaptista (que significa “uno que bautiza de nuevo”), pero, al final cedieron y acabaron por adoptar el nombre de bautistas.

¿Qué hay de los Estudiantes de la Biblia? El clero los llamó russelistas y rutherfordistas. No obstante, aceptar estos nombres habría fomentado un espíritu sectario. No habría concordado con la censura que el apóstol Pablo dio a los cristianos primitivos cuando escribió: “Cuando uno dice: ‘Yo pertenezco a Pablo’, pero otro dice: ‘Yo a Apolos’, ¿no son ustedes simplemente hombres [es decir, de punto de vista carnal y no espiritual]?”. (1 Cor. 3:4.) Algunas personas los llamaban “auroristas milenarios”; pero el Reinado Milenario de Cristo era tan solo una de sus enseñanzas. Otros los llamaban “los de La Torre del Vigía”; pero esto también era impropio, pues La Torre del Vigía era sencillamente una de las publicaciones que empleaban para difundir las verdades bíblicas.

Se necesitaba un nombre distintivo

Con el tiempo se hizo cada vez más evidente que, además de la designación de cristianos, la congregación de los siervos de Jehová realmente necesitaba un nombre que los distinguiera. Para la mayoría de las personas el significado del nombre “cristiano” se había distorsionado debido a que algunos individuos que decían ser cristianos solían conocer muy poco o nada de Jesucristo, su enseñanza y lo que deberían estar haciendo si es que en realidad eran sus seguidores. Además, a medida que nuestros hermanos entendieron mejor la Palabra de Dios, comprendieron la importancia de separarse y distinguirse de los sistemas religiosos que engañosamente afirmaban ser cristianos.

Es cierto que nuestros hermanos con frecuencia se llamaban a sí mismos Estudiantes de la Biblia, y que a partir de 1910 se dieron a conocer como Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia en lo relacionado con sus reuniones. En 1914, para evitar que hubiera confusión con una corporación legal que acababan de formar, llamada International Bible Students Association (Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia), adoptaron para sus grupos en las diversas localidades el nombre de Estudiantes de la Biblia Asociados. Sin embargo, su adoración implicaba mucho más que estudiar la Biblia. Además, había otras personas que también la estudiaban: algunas con devoción, otras con el fin de criticar y muchas sencillamente porque la consideraban una buena obra literaria. Entonces, después de la muerte del hermano Russell, algunos que solían apoyar las actividades de la Sociedad Watch Tower y la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia rehusaron cooperar y hasta se opusieron a la obra de estas sociedades. Aquellos grupos que se apartaron emplearon diversos nombres, y algunos hasta se aferraron a la designación de Estudiantes de la Biblia Asociados. Esto causó más confusión.

Pero entonces, en 1931, adoptamos el nombre realmente distintivo de testigos de Jehová. El autor Chandler W. Sterling califica esto como “un acto genial” de J. F. Rutherford, entonces presidente de la Sociedad Watch Tower. En opinión de este escritor, aquella fue una maniobra inteligente que no solo proveyó un nombre oficial para la agrupación, sino que también les hizo posible aplicar específicamente a los testigos de Jehová todas las referencias bíblicas a “testigo” y “testificar”. Por el contrario, A. H. Macmillan, quien colaboró en asuntos administrativos con tres presidentes de la Sociedad, dijo respecto al anuncio del hermano Rutherford: ‘Para mí no hay duda —ni la hubo entonces ni la hay ahora— de que el Señor lo guió en aquello, y de que ese es el nombre que Jehová quiere que llevemos, y nos hace muy dichosos y felices el tenerlo’. ¿Cuál de estas opiniones tiene el apoyo de los hechos? ¿Fue el nombre “un acto genial” del hermano Rutherford, o fue el resultado de la providencia divina?

Lo que llevó a la adopción del nombre

Fue en el siglo VIII a.E.C. cuando Jehová hizo que Isaías escribiera: “Ustedes son mis testigos —es la expresión de Jehová—, aun mi siervo a quien he escogido, para que sepan y tengan fe en mí, y para que entiendan que yo soy el Mismo. Antes de mí no fue formado Dios alguno, y después de mí continuó sin que lo hubiera. [...] Ustedes son mis testigos —es la expresión de Jehová—, y yo soy Dios”. (Isa. 43:10, 12.) Como se muestra en las Escrituras Griegas Cristianas, muchas profecías registradas por Isaías se cumplen con relación a la congregación cristiana. (Compárese Isaías 8:18 con Hebreos 2:10-13; Isaías 66:22 con Revelación 21:1, 2.) Con todo, Isaías 43:10, 12 nunca se examinó a fondo en The Watch Tower durante sus primeros cuarenta años de publicación.

Sin embargo, después de eso el estudio de las Escrituras llevó a los siervos de Jehová a tomar en cuenta nuevos desenvolvimientos de gran importancia. El Reino de Dios, con Jesús como Rey Mesiánico, había nacido en el cielo en 1914. En 1925, el año en que esto se explicó con claridad en The Watch Tower, el mandato profético del capítulo 43 de Isaías de ser testigos de Jehová recibió atención en once diferentes números de la revista.

En The Watch Tower del 1 de enero de 1926 el artículo principal planteó la desafiadora pregunta: “¿Quién honrará a Jehová?”. Durante los cinco años siguientes The Watch Tower analizó porciones de Isaías 43:10-12 en 46 diferentes números, y en cada ocasión aplicó la profecía a los cristianos verdaderos. * En 1929 se indicó que la cuestión de especial importancia que tiene ante sí toda la creación inteligente implica honrar el nombre de Jehová. Y vez tras vez se analizó Isaías 43:10-12 en conexión con la responsabilidad que tienen los siervos de Jehová respecto a esta cuestión.

De modo que los hechos muestran que, en su estudio de la Biblia, vez tras vez se les recalcaba la obligación que tenían de ser testigos de Jehová. Lo que se trataba no era el nombre de una agrupación, sino la obra que tenían que hacer.

Pero ¿con qué nombre se conocería a estos testigos? ¿Qué nombre sería apropiado en vista de la obra que efectuaban? ¿A qué conclusión llevaba la propia Palabra de Dios? Este asunto se trató en la asamblea de Columbus (Ohio, E.U.A.), del 24 al 30 de julio de 1931.

Un nombre nuevo

En la portada del programa de aquella asamblea aparecían las iniciales JW en letras grandes. ¿Qué significaban? No fue sino hasta el domingo 26 de julio cuando se explicó su significado. Aquel día el hermano Rutherford presentó el discurso público “El Reino, la esperanza del mundo”. En este discurso, al identificar a los proclamadores del Reino de Dios, el orador hizo referencia especial al nombre de testigos de Jehová.

Aquel mismo día el hermano Rutherford presentó otro discurso más tarde, y en él analizó por qué se necesitaba un nombre distintivo. * ¿A qué nombre señalaban las Escrituras mismas? El orador citó Hechos 15:14, que indica el propósito de Dios de sacar de entre las naciones “un pueblo para su nombre”. En su presentación recalcó que, como se indica en Revelación 3:14, Jesucristo es “el testigo fiel y verdadero”. Se refirió a Juan 18:37, donde Jesús declaró: “Para esto he venido al mundo, para dar testimonio acerca de la verdad”. Dirigió la atención a 1 Pedro 2:9, 10, donde dice que los siervos de Dios tienen que ‘declarar en público las excelencias de aquel que los llamó de la oscuridad a su luz maravillosa’. Razonó sobre varios textos de Isaías, algunos de los cuales no se entendían claramente entonces, pero luego llegó a la parte culminante de su presentación con el texto de Isaías 43:8-12, que incluye la comisión divina: “Ustedes son mis testigos —es la expresión de Jehová—, y yo soy Dios”. ¿A qué conclusión, pues, los estaba llevando la misma Palabra de Dios? ¿Qué nombre armonizaría con el modo como Jehová de hecho los estaba utilizando?

La respuesta obvia estuvo incorporada en la resolución que se adoptó con mucho entusiasmo en aquella ocasión. * La resolución decía en parte:

“Para que nuestro verdadero puesto se conozca, y creyendo que esto está en armonía con la voluntad de Dios, según se expresa en su Palabra, RESUÉLVASE, como sigue, a saber:

”QUE amamos mucho al Hermano Charles T. Russell, a causa de su obra, y que con gusto reconocemos que el Señor le usó y bendijo su obra en gran manera, pero no podemos consentir que nos llamen por el nombre ‘Russellistas’ y ser consistentes con la Palabra de Dios; que la Watch Tower Bible and Tract Society y la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia y la Peoples Pulpit Association son únicamente nombres de corporaciones que como compañía de gente cristiana poseemos, gobernamos y usamos para ejecutar nuestra obra en obediencia a los mandamientos de Dios, pero ninguno de estos nombres propiamente [se] adhiere o aplica a nosotros como cuerpo de cristianos que siguen en las huellas de nuestro Señor y Maestro, Cristo Jesús; que somos estudiantes de la Biblia, pero, como cuerpo de cristianos formando una asociación, rehusamos asumir o ser llamados por el nombre ‘Estudiantes de la Biblia’ o nombres semejantes como medio de identificación de nuestra propia posición ante el Señor; rehusamos llevar o ser llamados por el nombre de cualquier hombre;

”QUE, habiendo sido comprados con la sangre preciosa de Jesucristo nuestro Señor y Redentor, justificados y engendrados por Jehová Dios y llamados a su reino, sin vacilación declaramos nuestra completa lealtad y devoción a Jehová Dios y su reino; que somos siervos de Jehová Dios comisionados [para] hacer una obra en su nombre, y, en obediencia a su mandamiento, entregar el testimonio de Jesucristo, y dar a conocer a la gente que Jehová es el verdadero y Omnipotente Dios; por lo tanto gozosamente aceptamos el nombre que la boca de Jehová Dios ha pronunciado, y deseamos ser conocidos como y llamados por el nombre, de testigos de Jehová.Isa. 43:10-12.” *

Cuando toda la resolución se presentó, hubo un estruendoso y prolongado aplauso que indicó que el auditorio concordaba plenamente con lo que se acababa de decir.

Se acepta la responsabilidad

¡Qué honor tiene el que es portador del nombre del único Dios verdadero, el Soberano del universo! No obstante, este nombre conlleva responsabilidad. Una responsabilidad que otros grupos religiosos no desean asumir. Como el hermano Rutherford dijo en su discurso: “Bienaventurados los que pueden tomar un nombre que nadie bajo el sol desea con la excepción de los que están completamente y sin reserva dedicados a Jehová”. Sin embargo, ¡qué apropiado es que los siervos de Jehová lleven el nombre personal de Dios y lo den a conocer, y que este nombre se asocie de modo notable con la proclamación de Su propósito!

Cualquier grupo de personas, o cualquier persona, que hable en el nombre de Jehová se compromete a transmitir Su palabra verazmente. (Jer. 23:26-28.) Tienen que dar a conocer no solo lo que Jehová ha suministrado para la bendición de los que aman la justicia, sino también sus juicios contra los que practican lo injusto. Tal como Jehová mandó a sus profetas del pasado, así hoy sus testigos no deben quitar ninguna porción de la palabra de Dios manteniéndola oculta. (Jer. 1:17; 26:2; Eze. 3:1-11.) Tienen que proclamar tanto “el año de la buena voluntad de parte de Jehová” como “el día de la venganza de parte de nuestro Dios”. (Isa. 61:1, 2.) Los que adoptaron la resolución ya citada reconocieron esta responsabilidad, y en la misma resolución declararon:

“Como testigos de Jehová nuestro único propósito es ser completamente obedientes a sus mandamientos; dar a conocer que él es el [único] verdadero y Omnipotente Dios; que su Palabra es verdad y que su nombre es digno de toda honra y gloria; que Cristo es el Rey de Dios, a quien ha colocado en su trono de autoridad; que su reino ha llegado, y en obediencia a los mandamientos del Señor tenemos que declarar esta buena nueva como testimonio a las naciones e informar a los gobernantes y [a] la gente concerniente a la organización cruel y opresiva de Satanás, y especialmente con referencia a la ‘Cristiandad’, la cual es la parte más inicua de esa organización visible, y concerniente a los propósitos de Dios de destruir pronto a la organización de Satanás, y que este gran hecho será seguido rápidamente por Cristo [al traer] a los pueblos obedientes de la tierra paz y prosperidad, libertad y salud, gozo y vida eterna. Que el reino de Dios es la esperanza del mundo, y que no hay otra; y que este mensaje tiene que [ser llevado] por los que están identificados como testigos de Jehová.

”Humildemente invitamos a todas las personas que [están] completamente [dedicadas] a Jehová y su reino [a] participar en proclamar estas buenas nuevas a otros, para que la bandera justa del Señor se alce, para que los pueblos del mundo sepan donde encontrar la verdad y la esperanza [de] alivio; y, sobre todo, que el gran nombre santo de Jehová Dios se vindique y exalte.”

No fue solo en Columbus (Ohio, E.U.A.), sino hasta en lugares tan lejanos como Australia, donde los auditorios estallaron en aplausos al escuchar el anuncio del nuevo nombre. En Japón, después de intentarlo por varias horas, una parte pequeña del programa se pudo escuchar a mitad de la noche por transmisión de onda corta. Inmediatamente se tradujo. Así, el grupito reunido allí escuchó la resolución y el aplauso atronador. Matsue Ishii estaba allí, y como escribió posteriormente, los presentes ‘dieron un grito de gozo en armonía con sus hermanos de América’. Después de la asamblea de Columbus, las asambleas y las congregaciones de los testigos de Jehová de todos los países donde efectuaban su ministerio expresaron su completo acuerdo con aquella resolución. Como ejemplo, desde Noruega llegó el siguiente informe: “En la asamblea anual [...] en Oslo, todos nos pusimos de pie y con gran entusiasmo gritamos ‘Ja’ (sí), al adoptar el nuevo nombre ‘testigos de Jehová’”.

Más que una etiqueta

¿Se enteraría el mundo en general de que nuestros hermanos habían adoptado aquel nuevo nombre? ¡Sí, se enteraría! El discurso en el cual se anunció por primera vez el nombre se transmitió por la mayor red de radioemisoras empleada hasta entonces. Además, la resolución en la que se adoptó el nuevo nombre se incluyó en el folleto El Reino, la esperanza del mundo. Después de la asamblea, los testigos de Jehová distribuyeron millones de ejemplares del folleto en muchos idiomas en América del Norte y del Sur, Europa, África, Asia y las islas del mar. Además de ofrecer ejemplares de casa en casa, hicieron un esfuerzo especial por dejar un ejemplar en manos de todo funcionario gubernamental, hombre de negocios prominente y miembro del clero. En 1992, todavía algunos recuerdan bien la participación que tuvieron en aquella significativa campaña.

No toda persona aceptaba cortésmente el folleto. Eva Abbott recuerda que cuando ella salió de la casa de un clérigo en Estados Unidos, el folleto pasó volando y cayó al suelo enfrente de ella. No quiso dejarlo allí, de modo que lo recogió; pero de pronto un perro grande se le acercó, le gruñó, le arrancó de la mano el folleto, y se lo llevó a su amo, el ministro. Ella dijo: “Aunque yo no pude entregarle el folleto, ¡el perro lo hizo por mí!”.

Martin Poetzinger, quien después fue miembro del Cuerpo Gobernante de los Testigos de Jehová, recuerda: “La gente se asombraba en cada puerta cuando usábamos la presentación: ‘Lo visito hoy como testigo de Jehová’. Sacudían la cabeza o preguntaban: ‘Pero todavía son estudiantes de la Biblia, ¿no? ¿O están ahora en una nueva secta?’”. La situación fue cambiando poco a poco. Varias décadas después de empezarse a usar aquel nombre distintivo, el hermano Poetzinger escribió: “¡Qué cambio! Antes de que diga una palabra, la gente comenta: ‘Usted tiene que ser testigo de Jehová’”. Sí, ahora conocen el nombre.

Este nombre no es sencillamente una etiqueta. Sean de edad avanzada o jóvenes, hombres o mujeres, todos los testigos de Jehová participan en la obra de dar testimonio de Jehová y su magnífico propósito. Como resultado de ello, C. S. Braden, profesor de historia religiosa, escribió: “Los testigos de Jehová literalmente han cubierto la Tierra con su testificación” (These Also Believe [Estos también creen]).

Aunque la testificación de nuestros hermanos antes de que adoptaran el nombre de testigos de Jehová abarcaba toda la Tierra, en retrospectiva parece que Jehová los estaba preparando para una obra aún mayor: la recolección de una gran muchedumbre que sería conservada con vida a través del Armagedón y tendría la oportunidad de vivir para siempre en una Tierra paradisíaca.

[Notas a pie de página]

^ párr. 7 Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras; A Literal Translation of the New Testament . . . From the Text of the Vatican Manuscript (Una traducción literal del Nuevo Testamento a partir del texto del manuscrito Vaticano), por Herman Heinfetter; y seis traducciones al hebreo. Véase también la nota sobre Hechos 19:23 en la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras.

^ párr. 21 Entre los artículos principales de la revista Watch Tower que se publicaron durante aquel período estuvieron: “Jehová y sus obras”, “Honrad su nombre”, “Un pueblo para su nombre”, “Se ensalza su nombre”, “Testigo fiel y verdadero”, “¡Alaben a Jehová!”, “Deléitate en Jehová”, “Jehová el Supremo”, “Vindicación de su nombre”, “Su nombre” y “Cantad a Jehová”.

^ párr. 26 Véase el artículo “Un nombre nuevo”, en La Torre del Vigía de febrero de 1932.

^ párr. 27 La Torre del Vigía de enero de 1932, páginas 6, 7.

^ párr. 30 Aunque la prueba indica de forma convincente que Jehová dirigió la selección del nombre testigos de Jehová, La Atalaya (1  de julio de 1944, página 202; 15 de mayo de 1958, páginas 318, 319) y el libro “Nuevos cielos y una nueva tierra” (páginas 231-238) señalaron después que este nombre no es el “nombre nuevo” a que se hace referencia en Isaías 62:2; 65:15 y Revelación 2:17, aunque el nombre armoniza con la nueva relación a que se alude en los dos textos de Isaías.

[Comentario en la página 149]

“A los discípulos por providencia divina se les llamó cristianos”

[Comentario en la página 150]

La gente llegó a tener una idea distorsionada del significado del nombre “cristiano”

[Comentario en la página 151]

Eran más que sencillamente Estudiantes de la Biblia

[Comentario en la página 157]

“Ustedes son mis testigos —es la expresión de Jehová—, y yo soy Dios”

[Recuadro en la página 151]

(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)

El nombre testigos de Jehová en las Américas

Árabe ش‍هود ‍ي‍هوه‍

Armenio Եհովայի Վկաներ

Chino 耶和華見證人

Inglés Jehovah’s Witnesses

Francés Témoins de Jéhovah

Griego Μάρτυρες του Ιεχωβά

Groenlandés Jehovap Nalunaajaasui

Italiano Testimoni di Geova

Japonés エホバの証人

Coreano 여호와의 증인

Papiamento Testigonan di Jehova

Polaco Świadkowie Jehowy

Portugués Testemunhas de Jeová

Samoano Molimau a Ieova

Español Testigos de Jehová

Sranangtongo Jehovah Kotoigi

Tagalo Mga Saksi ni Jehova

Vietnamita Nhân-chứng Giê-hô-va

[Recuadro en la página 152]

Otros lo notaron

No fue solo “The Watch Tower” (La Torre del Vigía) la que mostró con la Biblia como base que Jehová tendría testigos en la Tierra. Algo que ilustra esto es que H. A. Ironside, en el libro “Lectures on Daniel the Prophet” (“Discursos sobre Daniel el profeta”, publicado originalmente en 1911), se refirió a aquellos en quienes se cumplirían las preciosas promesas del capítulo 43 de Isaías y declaró: “Estos serán testigos de Jehová, que testificarán del poder y la gloria del único Dios verdadero, cuando se haya entregado a la cristiandad apóstata al gran engaño de creer la mentira del Anticristo”.

[Recuadro en la página 153]

El nombre testigos de Jehová en el Oriente y las islas del Pacífico

Bengalí যিহোবার সাক্ষিরা

Becol, cebuano,

hiligaynon,

samareno-leyte,

tagalo Mga Saksi ni Jehova

Bislama Ol Wetnes blong Jeova

Chino 耶和華見證人

Inglés Jehovah’s Witnesses

Fijiano Vakadinadina i Jiova

Gujarati યહોવાહના સાક્ષીઓ

Hindi यहोवा के साक्षी

Hiri motu Iehova ena Witness Taudia

Iloko Dagiti Saksi ni Jehova

Indonesio Saksi-Saksi Yehuwa

Japonés エホバの証人

Kannada ಯೆಹೋವನ ಸಾಕ್ಷಿಗಳು

Coreano 여호와의 증인

Malayálam യഹോവയുടെ സാക്ഷികൾ

Marathi यहोवाचे साक्षीदार

Marshalés Dri Kennan ro an Jeova

Birmano ယေဟောဝါသက်သေများ

Nepalés यहोवाका साक्षीहरू

Pidgin de Nueva

Guinea Ol Witnes Bilong Jehova

Niueano Tau Fakamoli a Iehova

Palauan reSioning er a Jehovah

Pangasinán Saray Tasi nen Jehova

Ponapés Sounkadehde kan en Siohwa

Rarotongués Au Kite o Iehova

Ruso Свидетели Иеговы

Samoano,

tuvaluense Molimau a Ieova

Cingalés යෙහෝවාගේ සාක්ෂිකරුවෝ

Pidgin de las

Islas Salomón all’gether Jehovah’s Witness

Tahitiano Ite no Iehova

Tamil யெகோவாவின் சாட்சிகள்

Telugu యెహోవాసాక్షులు

Siamés พยานพระยะโฮวา

Tongano Fakamo‘oni ‘a Sihova

Trukes Ekkewe Chon Pwarata Jiowa

Urdu

Vietnamita Nhân-chứng Giê-hô-va

Yapés Pi Mich Rok Jehovah

[Recuadro en la página 154]

El nombre testigos de Jehová en África

Afrikaans Jehovah se Getuies

Amárico የይሖዋ ምሥክሮች

Árabe ش‍هود ‍ي‍هوه‍

Chichewa Mboni za Yehova

Cibemba Inte sha kwa Yehova

Efik Mme Ntiense Jehovah

Inglés Jehovah’s Witnesses

Ewé Yehowa Ðasefowo

Francés Témoins de Jéhovah

Ga Yehowa Odasefoi

Gun Kunnudetọ Jehovah tọn lẹ

Hausa Shaidun Jehovah

Igbo Ndịàmà Jehova

Kiluba Ba Tumoni twa Yehova

Kiniaruanda Abahamya ba Yehova

Kirundi Ivyabona vya Yehova

Kisi Seiyaa Jɛhowaa

Kwanyama Eendombwedi daJehova

Lingala Batemwe ya Jéhovah

Luganda Abajulirwa ba Yakuwa

Malgache Vavolombelon’i Jehovah

Moore A Zeova Kaset rãmba

Ndonga Oonzapo dhaJehova

Portugués Testemunhas de Jeová

Sango A-Témoin ti Jéhovah

Sepedi Dihlatse tša Jehofa

Sesotho Lipaki tsa Jehova

Shona Zvapupu zvaJehovha

Silozi Lipaki za Jehova

Swahíli Mashahidi wa Yehova

Tigrina ናይ የሆዋ መሰኻኽር

Tshiluba Bantemu ba Yehowa

Tsonga Timbhoni ta Yehova

Tsuana Basupi ba ga Jehofa

Twi Yehowa Adansefo

Vendal Ṱhanzi dza Yehova

Xhosa amaNgqina kaYehova

Yoruba Ẹlẹ́rìí Jehofa

Zulú oFakazi BakaJehova

[Recuadro en la página 154]

El nombre testigos de Jehová en Europa y el Oriente Medio

Albanés Dëshmitarët e Jehovait

Árabe ش‍هود ‍ي‍هوه‍

Armenio Եհովայի Վկաներ

Búlgaro Свидетелите на Йехова

Croata Jehovini svjedoci

Checo svĕdkové Jehovovi

Danés Jehovas Vidner

Holandés Jehovah’s Getuigen

Inglés Jehovah’s Witnesses

Estonio Jehoova tunnistajad

Finlandés Jehovan todistajat

Francés Témoins de Jéhovah

Alemán Jehovas Zeugen

Griego Μάρτυρες του Ιεχωβά

Hebreo עדי־יהוה

Húngaro Jehova Tanúi

Islandés Vottar Jehóva

Italiano Testimoni di Geova

Macedonio, serbio Јеховини сведоци

Maltés Xhieda ta’ Jehovah

Noruego Jehovas vitner

Polaco Świadkowie Jehowy

Portugués Testemunhas de Jeová

Rumano Martorii lui Iehova

Ruso Свидетели Иеговы

Eslovaco Jehovovi svedkovia

Esloveno Jehovove priče

Español testigos de Jehová

Sueco Jehovas vittnen

Turco Yehova’nın Şahitleri

Ucraniano Свідки Єгови

[Fotografía en la página 155]

Las siglas J W (sin explicación alguna) se destacaron en la asamblea de 1931. Se explicó su significado en un emocionante discurso sobre el nuevo nombre

[Fotografía en la página 156]

Se enorgullecían de decir a otros que eran testigos de Jehová