‘Escribieron sobre mi vida’

A lo largo de los años, ¡Despertad! ha publicado numerosos artículos relacionados con diversas enfermedades. Por supuesto, no es una revista médica, y por ello no recomienda ningún tipo específico de tratamiento. Sin embargo, cuando aborda el tema de una dolencia, intenta describirla, señalar sus causas y proporcionar consejos prácticos y basados en la Biblia a los enfermos y las personas que los cuidan.

Por ejemplo, el artículo “La fibromialgia: qué es y cómo sobrellevarla”, publicado en el número del 8 de junio de 1998, tuvo una buena acogida en todo el mundo. De hecho, se siguieron recibiendo cartas de agradecimiento muchos meses después de su publicación. Una mujer escribió: “Me siento como si me hubieran quitado un gran peso de encima”. Y otra lectora mencionó: “Es como si hubiesen escrito sobre mi vida. Ahora sé cómo afrontar esta enfermedad”.

También agradecieron el reportaje algunos profesionales de la medicina. Un director de asuntos médicos de la Arthritis Foundation de Estados Unidos escribió: “Creo que el artículo sobre la fibromialgia es muy bueno, trata el tema de forma equilibrada, y la información que proporciona es muy completa. Aplaudo asimismo la intercalación de los textos bíblicos y concuerdo con ustedes en que la fe es de gran ayuda cuando alguien sufre esta dolencia o cualquier otra”.

Se recibieron muchas cartas más. He aquí algunos extractos de ellas.

“El médico me animó a que leyese todo lo que pudiera hallar sobre el tema. Su artículo es el mejor que he encontrado.”—L. R.

‘Muchas personas me han preguntado sobre el mal que padezco. Normalmente les entrego un folleto. Ahora puedo dirigirles a este número de ¡Despertad! Nada es tan reconfortante como la información que presenta.’—K. K.

‘El artículo me recordó que no soy un fracaso y que todavía le importo a Jehová.’—D. C.

“Sentí, por primera vez, que otras personas comprendían por lo que estaba pasando.”—C. H.

‘Es alentador saber que no estamos solos.’—C. A.

‘Me siento muy mal porque ya no puedo hacer lo que hacía antes. Guardaré esta información cerca de la cabecera de mi cama para leerla cada vez que me sienta desanimada.’—K. B.

‘Hasta ahora he intentado pasar por alto el dolor y hacer lo sumo posible hasta que ya no puedo más y me desplomo. Me parece mejor lo que sugieren ustedes.’—M. C.

“Tengo 14 años, y me diagnosticaron fibromialgia cuando tenía 12. Saber que Jehová se preocupa por nosotros hizo que se me saltaran las lágrimas. Por favor, continúen escribiendo artículos animadores como este.”—K. A. M.